Tras la crisis que se vive entre Ucrania y Rusia, el gasoducto entre este último y Alemania presentó una suspensión en su aprobación. El Nord Stream 2 tiene la capacidad de suministrar gas suficiente de Rusia para 26 millones de hogares en Europa. Esto implica una manera de ayudar ala escacez de gas y los altos precios de energía en estas zonas. El costo fue asumido por la empresa de energía rusa Gazprom en su mitad y el resto por empresas occidentales como Shell y ENGIE de Francia. Respecto a lo que puede afectar esto en la crisis, sucede que Estados Unidos, tras lo que ocurre, afirmó comprometer el cierre de este gasoducto; esto, por tanto, representa un gran problema para Alemania.
Estados Unidos, Reino Unido y Polonia se han opuesto contundentemente a al Nord Stream 2 puesto que Rusia tendría más control del suministro de gas europeo y, como ya sucedió con Ucrania en 2006, por razones políticas, Rusia interrumpió el suministro de gas y ocasionó una crisis. Europa teme pase lo mismo en un futuro con ellos. Estados Unidos ha presentado sanciones a las firmas rusas pero no a las alemanas para no dañar relaciones con Berlín.
A manera de análisis, queda en evidencia el interés económico vs el interés político y militar. Los países están en un limbo, entre la espada y la pared para no perjudicar relaciones internacionales. Este gasoducto perjudica a Alemania y a Rusia, pero hay posiciones divididas. Lo cierto es que las sanciones y el poder Estadounidense se muestra cada vez con mayor firmeza. Estamos presenciando una lucha de poder y esto puede acabar en un enfrentamiento sin precedentes.
Fuente: BBC, 2022, tomado de: https://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-60480418
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